Opinión: Ganamos una gran batalla, pero no la guerra contra Hidroaysén

Opinión: Ganamos una gran batalla, pero no la guerra contra Hidroaysén

12 Junio 2014

“La verdadera foto de cumbre, es la que se toma en el campamento base, porque eso significaría que todos bajamos sanos y salvos” (Claudio Lucero, instructor y montañista)

Andrés Gillmore >
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No hay duda que la resolución delConsejo de Ministros que rechazó unánimemente el proyecto de HidroAysén demuestran que finalmente estamos entrando en la senda de los buenos procedimientos, pero a decir verdad lo tomo con mesura y tranquilidad, entendiendo que nos permite de una manera u otra a empezar a tener un poco más de fe y que el cambio por el cual hemos luchado todos estos años desde Aysén esta empezando a dar sus frutos.

Cuando iniciamos el proceso hace largos y desgastantes ocho años, desde la Corporación Costa Carrera (asociación de empresarios turísticos de la cuenca del Baker) sabíamos que la lucha seria complicada y nadie daba un peso por el objetivo, igualmente le pusimos fuerza y nos unimos al Consejo de Defensa de la Patagonia (CDP), porque entendíamos que no había peor batalla que la que no se daba, que si había que entregarse era mejor hacerlo con las botas puestas. La batalla en si mismo se proyecto por un Chile mejor, que fuera incluyente y no solo de algunos como venia sucediendo y estas reflexiones eran de mucho antes de los movimientos sociales y que la gente entendiera de regionalización. Teníamos la experiencia al haber ayudado para que no se concretara ALUMISA con su planta de aluminio a inicios de los noventa y pocos años después entramos en batalla en solitario como Costa Carrera en contra de las salmoneras, que querían usar las aguas del lago General Carrera para instalar sus jaulas y habíamos vencido. Esa experiencia nos dió la fuerza para entender que se podía y nos sustentamos en esa experiencia.

Cuando las cosas se complicaron y no veíamos soluciones ante la arrolladora maquinaria gubernamental y de la propia transnacional, que por momentos nos arrolló con su estrategia, lobby y fondos, supimos desde la corporación entregarle energía positiva donde más se necesitaba, en el mismo Aysén; entendíamos que no sacábamos nada con que las ONG en Santiago armaran revuelo si es que en Aysén no había mística y fuerza.

El nuevo ciclo de la batalla por Aysén se inicio en diciembre del 2010,  cuando como Costa Carrera ante la falta de perspectiva con que estaba el movimiento en ese entonces, tanto en Aysén como en Santiago y bajo la presidencia de Alejandro del Pino, decidimos atacar el proyecto en sus mismas entrañas, su estudio de impacto ambiental y marcar la diferencia. Para ello le solicitamos al CORE de Aysén, que se le hiciese una auditoria externa al Estudio de Impacto Ambiental (EIA) y que lo financiaran; conseguimos que nos apoyaran los alcaldes de Caleta Tortel y Chile Chico, municipios que entendían la problemática y que eran de la misma cuenca del Baker. Sabíamos de ante mano que el CORE era manipulado por el gobierno y que no se aprobaría la financiación de la auditoria, pero lo que buscábamos era dar un golpe de efecto, reavivar la lucha, darle esperanza a la gente y lo que pensábamos debería ser la estrategia de aquí en adelante. A pesar de todo casi lo logramos, si no hubiese sido por el Consejero Maldonado (UDI), que amenazó a los restantes consejeros en un recorrido nocturno por los domicilios lo habríamos logrado.

Desde ese día la Corporación Costa Carrera martilló como estrategia en cuanta conferencia de prensa se nos invitaba y escribíamos mucho al respecto, diciendo hasta el cansancio que el Estudio de Impacto Ambiental no reunía las condiciones, porque omitía el verdadero impacto en las comunidades, en los ríos y sobre todo en la proyección social, cultural y de vida de Aysén.Que de hacerse destruiría el turismo y la ganadería, actividades básicas de Aysén y enarbolamos la frase que nos representaba totalmente: AYSÉN ES MÁS QUE BOSQUES Y RÍOS, ES VIDA EN COMUNIDAD, RESPETO HACIA EL MEDIO AMBIENTE Y EL SER HUMANO. La verdadera batalla se daba desde Aysén y no desde Santiago humanizando la problemática.

Las señales que dió el gobierno en estas dos semanas previas a la decisión del Consejo, no fueron satisfactorias a pesar de la promesa dada por la Presidenta Bachelet. Teníamos serias dudas y las visitas del Ministro de Energía, Máximo Pacheco Matte y del Interior Rodrigo Pañailillo a Aysén, con solo días entre las dos visitas a pocos días de la decisión, enviaron mensajes confusos y ambiguos; partiendo de la base que HidroAysén había entrado al sistema de evaluación ambiental bajo la administración de la misma Presidenta Michelle Bachelet en su primer mandato en el 2008 y eso no se olvida tan fácilmente. El Ministro de Energía nos confundía aun más, hablando sobre la necesidad de usar los hidro-recursos para generar energía y que es la solución al problema energético de la matriz y cuando uno sabe leer el entre líneas, sabe que el Ministro Pacheco quiere represas en la Patagonia, no como las de HidroAysén, pero las quiere y no podemos olvidar que los derechos de agua del Baker y Pascua, aun están en manos de ENDESA y los de la represa Baker 2 están en manos de la transnacional AESGENER y no hay duda que ahora la batalla es por el agua y mientras esta no se nacionalice nada a cambiado en el horizonte. 

Tomando en cuenta lo del párrafo anterior, fue un balde agua fría recibir un día antes de la resolución del Consejo, la noticia que el Ministro de Energía aceptaba que el ex Ministro de Economía, Pablo Longueira, se uniese a su ministerio como su asesor directo, para llevar adelante la nueva agenda energética del gobierno, apelando a que es un hombre bien intencionado, con mucha experiencia para aportar al tema como ex Ministro de Estado, olvidándose completamente el porque el señor Longueira tuvo que renunciar tan abruptamente a su candidatura a la presidencia por la Alianza y que cuando fue Ministro de Estado hizo todo lo posible para que se aprobara HidroAysén a pesar de todas las irregularidades del Estudio de Impacto Ambiental, que el como entendedor del tema debía de estar al corriente. Además es sabido que desde siempre Longueira ha sido un representante de las transnacionales (ley de pesca). Cuando el dice que no pide un sueldo a cambio al gobierno, es porque su sueldo podría estar financiado por las mismas transnacionales y hoy es un caballo de Troya de las transnacionales en el gobierno de la Nueva Mayoría y la aceptación de su presencia en el Ministerio de Energía, pudo haber sido perfectamente uno de los ítems de la negociación entre las transnacionales y el gobierno para decir no a HidroAysén.

No podemos olvidar que todo tiene su letra chica y en este caso no escapamos a este fundamento; aunque el Consejo de Ministros haya rechazado HidroAysén en forma tan unánime y por todo lo expresado anteriormente, a decir verdad que no es tan definitivo como se puede creer y aun existen etapas que deben superarse si queremos de verdad avanzar en el tema como corresponde y sellar la resolución, para que esto no haya sido simplemente una puesta en escena estratégica para dejarnos contentos y seguir camino.

HidroAysén tiene la potestad de apelar la resolución del Consejo ante los Tribunales Ambientales con sede en Valdivia, que ve los temas de la región de Aysén. La transnacional tiene como plazo treinta días desde la resolución oficial del Consejo para hacer valer la intención y de concretarse en este caso toda la responsabilidad recaería en este tribunal. También esta pendiente el tema de los derechos de aguas de los ríos de Aysén, que aun están en manos de ENDESA. Perfectamente podrían volver con la intención, solo que esta vez bajo otro formato y con diferentes socios, que es una variable plenamente posible; incluso se ha dicho por los diferentes medios, que ese nuevo socio podría ser el mismo Estado chileno y que en vez de construirse cinco represas se construirían cuatro, lo que al final es lo mismo para Aysén.

Tampoco podemos olvidar que siguen amenazados con centrales de represas y con las mismas deficiencias en los estudios de impactos ambientales tal como lo esta HidroAysén; el río Puelo en la región de Los Lagos y la ciudad de Puerto Aysén se encuentra bajo seria amenaza con el proyecto de Energía Austral de la transnacional XSTRATA (Suiza), que pretende represar los ríos Cuervo y Blanco, con un claro riesgo de vida para esa comunidad de llevarse a cabo.

Como reflexión final no podemos estar más alegres con la resolución del Consejo de Ministros, pero entendiendo que solo se ganó una gran batalla, importantísima por cierto, porque marca un camino, pero indudablemente aun queda mucho por recorrer si queremos de verdad hacer las cosas bien.