The Mandalorian: “This is the way”

31 Diciembre 2020

Para los que somos fans del universo de Star Wars y que crecimos viendo las películas originales, ver The Mandalorian fue una bocanada de aire mientras nos ahogábamos en ese pantano de malas ideas que fueron la trilogía de películas post adquisición de Disney.

Hans Spuler >
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Escribo estas palabras momentos después de terminar la segunda temporada de esta serie. Con las emociones a tope, tal vez esta columna sea de lo más imparcial y “fanboy” que alguna vez se ha visto.

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Para los que somos fans del universo de Star Wars y que crecimos viendo las películas originales, ver The Mandalorian fue una bocanada de aire mientras nos ahogábamos en ese pantano de malas ideas que fueron la trilogía de películas post adquisición de Disney. Fue tal el daño hecho a la franquicia desde el estreno de “The Last Jedi” que al menos este servidor había perdido casi todo el interés de seguir poniendo atención a las historias que vendrían desde la casa del ratón mas poderoso y conocido del mundo.

El que parecía el clavo final en el ataúd se nos dio con “The Rise of Skywalker”, una de las peores películas que he tenido el disgusto de ver en una sala de cine, me hizo pensar que ya no había vuelta atrás. Por suerte, y sin que nadie lo esperara, un grupo de héroes sin capa encabezados por un tal Jon Favreau (director de Iron Man, que catapultó el inicio del MCU) y un menos conocido David Filoni (Clone Wars), decidieron tomar este fierro caliente que quedó tras el desastre de la última película y crearon lo que hoy por hoy es el gran fenómeno del streaming. No olvidemos que Disney hizo debutar su propia plataforma (para competir con Netflix, Amazon, etc.) el año pasado precisamente con el estreno de “The Mandalorian” como su caballito de batalla.

Para los que no conocen la serie, la mejor forma de describirla es decir que es un western espacial, muy influenciado por la obra de directores como Sergio Leone y su trilogía del dólar. Tanto en su estética como en su narrativa, su música (es cuestión de escuchar ese maravilloso tema de intro) y personajes solitarios y duros. Esto mezclado con la llamada ópera espacial, usa todos los clichés clásicos del género pero que se adaptan y funciona de mil maravillas en el contexto del universo creado por George Lucas.

No les aburriré con una descripción detallada de la trama ni de sus personajes, además no quiero arruinarles una experiencia que debe ser vista para ser disfrutada. Sólo diré un par de detalles que como fan y sobre todo como chileno (un poco de orgullo ñoño nacionalista no está de más) hacen que la serie me llegue mucho más de lo que jamás pensé. Su protagonista es un tal Pedro Pascal. Para los fans de Game Of Thrones muy conocido por su papel del príncipe Oberyn Martell (AKA La Víbora Roja) y que acá toma la armadura mandaloriana y da vida a Din Djarin. En una de sus tantas misiones de caza recompensas se ve envuelto en una conspiración a escala galáctica que tiene como núcleo la figura del ya a estas alturas ícono mundial “baby Yoda”.  Pedrito para los que no saben es chileno. Sus padres eran simpatizantes del presidente Salvador Allende y luego del golpe militar tuvieron que emigrar a USA. Hoy es uno de los actores mas conocidos a nivel mundial.

Como dice el lema mandaloriano “This is the way”. Esta es la forma de hacer historias para los fans. El gran mérito de la serie es que recupera el alma de Star Wars. Toda esa magia que es tan fácil de explicar, pero tan difícil de replicar. Incluso su propio creador no pudo hacerlo en su saga de precuelas. Hoy somos testigos de un evento que te llega al corazón. Apelando quizá a fórmulas conocidas pero que en un 2020 tan triste y gris es mas que bienvenido. Fans que aún no la ven, por favor no se priven de esta maravilla. No fans, denle una chance. Les aseguro que por lo bajo se van a entretener mucho y quién sabe, tal vez hasta se pasen a nuestro grupo de rebeldes que aún seguimos creyendo en Star Wars.

Gracias Jon, gracias, Dave. Ustedes le han dado una nueva esperanza a millones de fans que habían gritado de agonía luego del fiasco de “Rise of Skywalker”. Esperemos que este nuevo contraataque del imperio Disney para ganar de vuelta la confianza de los fans no se quede solo en una amenaza fantasma y que todo este despertar de la fuerza no sea en vano y sigamos vibrando y emocionándonos como cuando éramos niños, en esta galaxia muy muy lejana.

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