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Desde que se supo de la aprobación del proyecto de Bocamina 2, de inmediato comenzaron las reacciones de ambientalistas y pobladores cercanos al lugar donde se ubicará la planta. Sin embargo, al parecer el diálogo entre Endesa y los habitantes de La Colonia se retomará hoy, luego que los hombres que se mantenían enterrados en ceniza depusieran su medida de presión.

Los dirigentes que representan a las 500 familias que aún no han sido erradicadas y que exigen millonarias sumas – se habla de $60 millones por familia- para irse del lugar se mostraron abiertos a retomar la conversación con la empresa, aunque no descartan volver a tomar alguna medida similar en caso que sus demandas no sean escuchadas.

Sin embargo, Endesa ya dejó en claro que no entregará ningún tipo de compensación económica, y que su interés pasa por ofrecer un mejor entorno a las personas que vivirán cerca de la planta, a través de planes de mejoramiento urbano y otras iniciativas que quieren implementar de común acuerdo con los habitantes de La Colonia.

Y más allá de eso, se mantienen otras interrogantes como el tema ambiental y la petición que se declare zona saturada, y las demandas aún no respondidas de pescadores y algueras que trabajan en el lugar. Por lo pronto, ayer se constituyó un comité operativo de cumplimiento en vertedero de Central Termoeléctrica Bocamina, instancia impulsada por la Seremi de Medioambiente de la Región del Bío Bío.