Claudia Peirano firmó en 2013 un documento que se oponía a la educación gratuita. Ahora, había sido nombrada como subsecretaria de Educación por Michelle Bachelet, quien justamente tiene como una de sus grandes promesas de Gobierno lograr algo que ella no apoyó antes. La presión de todos los sectores dio frutos, y Peirano renunció antes de asumir el cargo.

Una medida que no dejó indiferentes a políticos y dirigentes estudiantiles locales. El senador Víctor Pérez Varela comentó que "la falta de prolijidad del futuro gobierno preocupa, ya que antes de que asuma, hay una subsecretaria renunciada y otro cuestionado moralmente para asumir el cargo".

Además, agregó que "lo más preocupante es ver quiénes trabajaron en la selección de ministros y subsecretarios, y omitieron este tipo de antecedentes. Como oposición este tipo de hechos no los vamos a tolerar y vamos a estar muy atentos, porque vamos a resguardar los intereses de los chilenos en todos los ámbitos”.

Gesto valorable

Para Boris Negrete, dirigente de la Universidad Católica de la Santísima Concepción - UCSC - , "fue una actitud valorable la de dar un paso al costado, considerando los duros cuestionamientos efectuados a su nombramiento".

Además, agregó que "así estamos más tranquilos y esperanzados que la presidenta pueda cumplir con los compromisos anunciados para su plan de gobierno".