Si bien la entrega de billetes falsificados ocurre durante todo el año, es en época de fiestas y de vacaciones cuando este delito aumenta, debido principalmente a que la atención de las personas disminuye al dejarse llevar por el relajo de la época estival.

El subcomisario Luis Toro, de la Brigada de Delitos Económicos (Bridec) de Concepción, informó que es fundamental que las personas conozcan los elementos de seguridad del papel moneda y sus características, ya que cuentan con varios puntos identificables.

El oficial hizo un llamado a la comunidad a no realizar transacciones que involucren dinero en la vía pública y a desconfiar de los desconocidos que le pidan cambiar efectivo, especialmente si son billetes de alta denominación.

En tanto desde el Laboratorio de Criminalística (Lacrim) de Concepción, indicaron que los billetes tienen elementos que pueden ser reconocidos a simple vista o con algún instrumento, como la luz ultravioleta.

El primer punto a identificar es la marca principal de los billetes. “Los billetes de $10.000 y $20.000 tienen una marca de agua que se distingue al trasluz, la cual viene incorporada a la masa del papel. En tanto, los de $1.000, $2.000 y $5.000 presentan una ventanilla trasparente donde aparece la imagen del personaje del billete”, detalló Elizabeth Pacheco, perito documental de la PDI.

La perito agregó que los billetes “también tienen hilo de seguridad, una microimpresión y una franja 3D, entre otros elementos, que al tacto presentan relieve”.

Finalmente Elizabeth Pacheco detalló que la marca de agua no está dibujada, sino que es parte del billete. Entonces cuando éste es falso y se expone a la luz ultravioleta fluorescente, se nota una mancha sobre el billete, ya que el papel que se utiliza para la falsificación tiene un blanqueante óptico.