Una mujer que le miente a su propio Presidente con tal de asegurar su voluntad y su apoyo político es, por decir lo menos, un error imperdonable. Y si no es un error, si el Presidente Piñera se siente representado e inspirado por el modo de hacer las cosas de la intendenta, si ella encarna los valores del gobierno de los mejores, entonces que no se extrañe esta administración de la sostenida baja en las encuestas. Entonces que no se asombren si los atributos de ?confiable? y ?creíble? son los que más esquivos le resultan al mandatario.
La ciudadanía muestra, una vez más, su desprecio por el tono ?bonachón? con el que se sigue cimentando la desvergüenza, la mentira y la desigualdad.
Una mujer que le miente a su
Una mujer que le miente a su propio Presidente con tal de asegurar su voluntad y su apoyo político es, por decir lo menos, un error imperdonable. Y si no es un error, si el Presidente Piñera se siente representado e inspirado por el modo de hacer las cosas de la intendenta, si ella encarna los valores del gobierno de los mejores, entonces que no se extrañe esta administración de la sostenida baja en las encuestas. Entonces que no se asombren si los atributos de ?confiable? y ?creíble? son los que más esquivos le resultan al mandatario.
La ciudadanía muestra, una vez más, su desprecio por el tono ?bonachón? con el que se sigue cimentando la desvergüenza, la mentira y la desigualdad.