Bajo la consigna “EssbioNO!” el presidente del Partido MAS manifestó su desacuerdo con el anuncio del Presidente Sebastián Piñera de vender las acciones del Estado en de las sanitarias Aguas Andinas, Esval, Essbio y Essal, lo que a juicio del legislador vendría a privatizar el 100% de las empresas y concluir así, con el proceso que se inició en el gobierno del ex Presidente Eduardo Frei en lo que -cada vez más convencidos- consideramos que fue un gran error, el que posteriormente profundizó el ex Presidente Lagos”.
Junto con lo anterior, Navarro dijo que “es burdo usar la reconstrucción como excusa para privatizar las sanitarias, cuando el país entero sabe que nuestro país goza de dineros frescos que ingresaron por el crecimiento económico de este año, los que superan los 5.800 millones de pesos, especialmente por el alto e histórico precio que ha alcanzado el cobre. Por lo que es inexplicable que se busque artilugios que faltan a la verdad para vender el capital del Estado y profundizar el proceso de privatización nacional”.
Además, el parlamentario rechazó que la medida “se de a conocer entre gallos y media noche, y que no se haya sido de cara al país y a las autoridades, favoreciendo un debate sobre los verdaderos alcances de la iniciativa”.
El senador de la región del Bío Bío, donde opera la sanitaria que tiene un 44,31% de participación estatal y fiscal, manifestó que esta empresa “ya antes de la privatización era una empresa que siempre tuvo utilidades, siendo la sanitaria más rentable de Chile, que fue siempre uno de nuestros principales argumentos para rechazar su venta a privados. Por cierto, ha seguido teniendo óptimos rendimientos financieros, y aunque nos alegramos que sea un fondo previsional de profesores de Canadá el que obtenga los mayores beneficios por su participación en la empresa queremos que la región, el país y el Estado también lo sigan haciendo”.
Navarro dijo que “el que el Estado tenga participación en las sanitarias no es un tema de ser más o menos estatistas como algunos pretenden plantearlo: lo que busca es garantizar la fiscalización y la supervigilancia del servicio que se ofrece a los ciudadanos. Y en ese sentido, la gente debe estar advertida de que con el paso de un 100% a manos de privados, provocará el aumento de las cuentas del agua y la transformación de la misma en un monopolio total. Por ello, la única forma que el negocio esté regulado es que el Estado tenga una participación en conjunto con la empresa privada”.
El parlamentario dijo que “aunque se intente minimizar la participación del Estado en las sanitarias, la verdad es que no pueden relativizarse los más de 80 mil millones de pesos que la CORFO ha recibido entre 2000 y 2009 por este concepto, los que por cierto van en beneficio de muchos de los usuarios del sistema sanitario que se encuentran entre los sectores socioeconómicos más vulnerables y que requieren de un subsidio para pagar sus cuentas”.
“Además -agregó- no parece coherente que mientras muchos países en el mundo consultan a sus ciudadanos sobre la privatización e incluso retrotraen algunas medidas en ese sentido, cuando otras naciones han establecido normas para garantizar un consumo mínimo vital de agua potable para todos sus habitantes e incluso, como en el caso de la propuesta efectuada por el Presidente de Bolivia de declarar el acceso al agua potable como un derecho humano, en Chile sigamos avanzando innecesariamente hacia la privatización total de ese servicio”.
Finalmente el legislador del MAS, junto con recordar que ya hace años atrás una consulta ciudadana efectuada en la Región del Bío-Bío rechazó la privatización de Essbio, comentó que junto a las organizaciones regionales de defensa del consumidor, comenzarán una campaña de difusión de información bajo el slogan “EssbioNO!”, en donde darán a conocer los negativos alcances que tiene la exclusión del Estado en empresas tan importantes como las sanitarias”.
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